16.5.12

«Vuestra tristeza se convertirá en gozo» Jn 16,20


Jesús, el Cristo,
Tú no quieres para nadie la tribulación interior.
Y vienes a esclarecer  el profundo misterio del dolor humano.
He aquí como, por medio de él,
nos acercamos a una intimidad con Dios.
Espíritu Santo Consolador,
concédenos aligerar  la pena de los inocentes
y estar atentos a los que, pasando por situaciones de prueba,
irradian por su vida, la santidad de Cristo Jesús.
H Roger de Taizé