11.1.12

«Compadecido de él, extendió su mano, le tocó» Mc 1,40

RUPNIK

ME RECIBO CONTINUAMENTE DE TUS MANOS

“Me recibo continuamente de tus manos.
Esa es mi verdad y mi alegría.
Tus ojos me miran constantemente
y yo vivo de tu mirada.
Mi creador y mi salvación,
enséñame en el silencio de tu presencia
a captar el misterio que yo soy.
Y que soy por Ti, ante Ti y para Ti”.

Romano Guardini