30.7.11

A mayor gloria de Dios

San Ignacio: El Peregrino (Monserrat Gudiol)

EL NECESARIO DERRUMBRE

 

De Ignacio de Loyola se suele decir que vivió el inicio de su conversión durante el largo proceso de curación de su pierna herida. Sin embargo previo a ello se dio el acontecimiento que originaría todo: el cañonazo recibido, las horas herido entre los escombros de la muralla de Pamplona. Como señala acertadamente Jose Ignacio Tellechea en la biografía de Ignacio "Sólo y a pie", debemos tener en cuenta que seguramente tardaron mucho en encontrar a Ignacio y darle los primeros auxilios.

Ignacio llega a Pamplona como un hombre criado en la corte de Arévalo. Había desarrollado una labor diplomática notable. Tenía altas miras, incluso se dice que aspiraba a los amores de una de las infantas de Castilla. Desde luego el plan de vida de Ignacio no contaba entre sus objetivos con pequeñas cosas, para él no existía la mediocridad. Aspiraba ya a ese "magis" que luego será tan importante en la Compañía, pero en este momento simplemente era un "magis" radicado en el puro ego.

Imaginemos pues la escena: Ignacio ha llegado a Pamplona como parte de las tropas que defienden Castilla del ataque francés. Seguramente subido a la muralla ya puede imaginar los laureles del triunfo que traerá su arriesgada defensa de la ciudadela. Una bala de cañón se interpondrá entre él y la consecución del honor.  Entre las ruinas de piedra de la muralla encontramos las ruinas de un plan de vida. El necesario derrumbe de las construcciones egoícas para que puedan emerger los contenidos cuya matriz está más allá, en el "hondón" de la persona.

Hoy celebramos la fiesta de San Ignacio, le cantaremos como fundador de la Compañía, patrón de Bizkaia. Pero no nos debiera pasar desapercibido que ese final tuvo en su inicio un derrumbe y una casi muerte.

Personalmente suelo evocar en ocasiones esa imagen de Ignacio entre las ruinas de las murallas de Pamplona. Me sugiere que muchos pasamos años de nuestras vidas haciendo planes, ideando proyectos que, sin embargo, deben caer, no sirven, no son reales. Nuestra mente y nuestro ego se alían y nos dan una lectura del mundo: "Para ser feliz debería tener eso o aquello", "para vivir tranquilo te hace falta...". Entonces le otorgamos a la felicidad, a la paz, a la realización personal una forma concreta, un rostro concreto, un lugar concreto, una edad, una cantidad de euros en el banco, etc. Necesitamos un cañonazo para despertar. Precisamos, a veces, casi morir para dejar que se desvele lo que hay más allá, lo que no se derrumbará nunca pero que no obstante nos aterra.

Es curioso de qué manera los seres humanos nos auto engañamos por miedo. Nos aterra la realidad. Y la realidad es que la vida sólo descubre su belleza a quien se atreve a ser despojado. Hay que subir a la muralla, si, pero para dejar que ésta se derrumbe. Lo increíble es que descubriremos que no perdemos sino aquello que debamos perder y si debíamos perderlo es que no era la pieza buena para la construcción de nuestra existencia. Urge entonces dejar ir, soltar amarras, abrir las manos con el gesto de quien deja libre a un pajarillo. Todo lo que deba regresar lo hará. Pero deberemos afinar la mirada. Aquello que es esencial estará ahí, se nos otorgará pero seguramente no con la forma, no con el rostro, no con la apariencia que nuestra mente se empeñaba en darle. Deberemos vivir un tiempo de adaptación de la mirada. Nos sentiremos, al principio, un tanto huérfanos, muy vulnerables, como desorientados. Es normal. Como Ignacio, pasaremos un tiempo paralizados y doloridos entre las ruinas. Pero alguien vendrá y nos rescatará. Alguien nos alzará, nos llevará en volandas. Esta es la buena noticia que siente dentro de sí el creyente: Alguien es capaz de alzarnos de entre el polvo. Alguien amoroso nos cura las heridas. Alguien paciente espera a que sepamos ver y mirar mirándonos Él con infinita ternura.

Feliz fiesta de San Ignacio, fiesta del derrumbe de lo falso, fiesta del nacimiento procesual a una mirada nueva, a una comprensión nueva de las cosas y de Dios. Quizá quedemos heridos, con una señal en la pierna, con una cojera de por vida, pero será herida de vida, no herida de muerte, cojera que nos recuerde que lo que portamos dentro como tesoro de sabiduría, se nos dio, no nos pertenece. GORA SAN INAZIO!!

Escrito y publicado por: Elena Andrés Suaréz en el blog "Regreso a casa: Educar la interioridad"

EN TODO AMAR Y SERVIR

Cuadros de Francisco Valdepeñas
Música de Elena Andrés

28.7.11

"Te preocupas y te agitas por muchas cosas; y hay necesidad de pocas, o mejor, de una sola" Lc 10, 41-42

Sólo hay una cosa importante
 (TODO ES DON) 
Sólo hay una cosa importante,
sólo hay una cosa mejor:
conocer el Amor y el Amante,
conocer al que te conoció.
Sólo hay una cosa importante,
sólo hay una cosa mejor:
al final contemplar Su semblante,
y escuchar, al oído, su voz.
Sólo hay una cosa importante:
escuchar la Palabra de Dios,
caminar porque Él va delante,
y llevar esa cruz que Él llevó.
Sólo hay una cosa importante,
y es buscar siempre el Reino de Dios.
Lo demás se nos da por sobrante.
Todo es gracia, de Él todo es don;
todo es gracia, de Él todo es don.

Letra y música : Gonzalo Mazarrasa
 Cuadros RUPNIK

26.7.11

MI TESORO

MI TESORO
He perseguido sueños vanos,
he comprado tesoros vacíos.
He querido aprisionar amores
y he cerrado con llave mi hogar,
para que no lo invadan.

He vestido mis dudas con falsas certezas
y he tratado de matar mis anhelos cerrando mis ojos,
pero, al final vuelvo a estar
desnudo y temblando,
hasta que , al encontrarte, todo cambia.
Tu Evangelio es fuego que me enciende,
llamada que me pone en camino,
tesoro por el que lo vendo todo y soy tan pobre y tan rico.
Tu palabra despierta la pasión.
Tu vida es lección que me enseña a vivir,
a querer,
a saltar al vacío.

Contigo, los sueños son posibles,
los tesoros infinitos,
el amor eterno.
La puerta está abierta, y el hogar repleto,
de momentos,
de historias,
de encuentros.
La fe arriesga,
y el miedo calla.

Me visto de Ti,
en mi debilidad tu fuerza,
y todo encaja... "

" Peregrinar : por fuera y por dentro ", José Ma. Rodríguez Olaizola, SJ
(Rezandovoy)

24.7.11

¿Por qué hablas sobre Él?

EL CANTO DEL PAJARO
Los discípulos tenían multitud de preguntas que hacer acerca de Dios.
Les dijo el Maestro:
«Dios es el Desconocido y el Incognoscible.
Cualquier afirmación acerca de Él, cualquier respuesta a vuestras preguntas,
no será más que una distorsión de la Verdad».
Los discípulos quedaron perplejos: «Entonces,
¿por qué hablas sobre Él?».
«¿Y por qué canta el pájaro?», respondió el Maestro.
El pájaro no canta porque tenga
una afirmación que hacer.
Canta porque tiene un canto que expresar.
Anthony de Mello

23.7.11

"EL TESORO": Sentido de la VIDA

Mi pequeño tesoro  (Presuntos Implicados)

 Mi pequeño tesoro
se halla escondido
entre el valle y el monte
que hay en mi ombligo.
Mi pequeño trocito de gloria,
es el alba que alumbra
una nueva historia.

Mi pequeño tesoro
quiere ver cosas,
y por él me despliego
como una rosa.
Mi pequeño trocito de vida,
es un ángel que viene a mí
de puntillas.

Tengo cinco razones
para quererte,
una atada a mi espalda,
y otra a mi suerte,
y las tres que me quedan, son
tu sonrisa,
tu ternura sin falta
y otras delicias

21.7.11

«¿Habéis visto al amor de mi alma?» cnt 3,3

¡¡¡Te busco!!!

TE BUSCO
Al cielo una mirada larga
buscando un poco de mi vida
mis estrellas no responden
para alumbrarme hacia tu risa

Olas se esfuman de mis ojos
a una legión de tus recuerdos
me roban formas de tu rostro
dejando arena en el silencio

Te busco perdida entre sueños
el ruido de la gente
te envuelven en un velo
te busco volando en el cielo
el viento te eleva, como un pañuelo viejo
y no hago más que rebuscar
paisajes conocidos
en lugares tan extraños,
que no puedo dar contigo

En cualquier huella te persigo (voy tras de ti)
en una sombra te dibujo (al recordar)
huellas y sombras que se pierden (en la soledad)
la suerte no vino conmigo

Te busco perdida entre sueños
el ruido de la gente
te envuelven en un velo
te busco volando en el cielo
el viento te eleva, como un pañuelo viejo
y no hago más que rebuscar
paisajes conocidos
en lugares tan extraños,
que no puedo dar contigo

Te busco perdida entre sueños
el ruido de la gente
te envuelven en un velo
te busco volando en el cielo
el viento te eleva, como un pañuelo viejo
y no hago más que rebuscar
paisajes conocidos
en lugares tan extraños,
que no puedo dar contigo

Y te busco
                                                         Celia Cruz

16.7.11

¡Dame tu incógnita aventura!


El alma era lo mismo que una ranita verde
El alma era lo mismo
que una ranita verde,
largas horas sentada sobre el borde
de un rumoroso
Misisipí.
Desea el agua, y duda. La desea
porque es el elemento para que fue criada,
pero teme

el bramador empuje del caudal,
y, allá en lo oscuro, aún ignorar querría
aquel inmenso hervor
que la puede apartar (ya sin retorno,
hacia el azar sin nombre)
de la ribera dulce, de su costumbre antigua.
Y duda y duda y duda la pobre rana verde.
Y hacia el atardecer,
he aquí que, de pronto,
un estruendo creciente retumba derrumbándose,
y enfurecida salta el agua

sobre sus lindes,
y sube y salta
como si todo el valle fuera
un hontanar hirviente,
y crece y salta
en rompientes enormes,
donde se desmoronan
torres nevadas contra el huracán,
o ascienden, dilatándose
como gigantes flores que se abrieran al viento,
efímeros arcángeles de espuma.
Y sube, y salta, espuma, aire, bramido,
mientras a entrambos lados rueda o huye,
oruga sigilosa o tigre elástico
(fiera, en fin, con la comba del avance)
la lámina de plomo que el ancho valle oprime.
Oh, si llevó las casas, si desraigó los troncos,
si casi horadó montes,
nadie pregunta por las ranas verdes...
... ¡Ay, Dios,
cómo me has arrastrado,
cómo me has desarraigado,
cómo me llevas
en tu invencible frenesí,
cómo me arrebataste
hacia tu amor!
Yo dudaba.
No, no dudo:
dame tu incógnita aventura,
tu inundación, tu océano,
tu final,
la tromba indefinida de tu mente,
dame tu nombre,
en ti.
Dámaso Alonso
Hijos de la ira. Ed. Espasa Calpe

15.7.11

¡Bendición de tu Madre!

Icono Virgen del Carmen
 Mother's Blessing: BENDICIÓN DE TU MADRE
 (Snatam Kaur)
Tomado del blogger de Elena Andrés

13.7.11

¡El descanso!

Te amaré (Silvio Rodríguez)
Te amaré, te amaré como al mundo
te amaré aunque tenga final
te amaré, te amaré en lo profundo

te amaré como tengo que amar.

Te amaré, te amaré como pueda
te amaré aunque no sea la paz

te amaré, te amaré lo que queda
te amaré cuando acabe de amar.

Te amaré, te amaré si estoy muerto
te amaré el día siguiente además

te amaré, te amaré como siento
te amaré con adiós, con jamás.

Te amaré, te amaré junto al viento
te amaré como único ser
te amaré hasta el fin de los tiempos
te amaré y después te amaré.